El chofer de un camión de bomberos fue multado por conducir a excesiva velocidad cuando se dirigía a apagar un incendio. En su defensa, el bombero dijo que responden rápido a un llamado de esa naturaleza, pero que igual iba con cuidado.
La dirección de tránsito de una comunidad en Valencia, España, multó con 100 euros al conductor de un camión de bomberos por conducir a excesiva velocidad cuando se dirigía a apagar un incendio.
Los trabajadores del departamento de bomberos acudían por el llamado de un accidente vial, en el que la cabina de un camión de basura volcado ardía en llamas, según reportó el sitio Las Provincias.es.
"Cuando vamos a un servicio queremos llegar lo antes posible. Eso no quiere decir que vayamos de cualquier manera", se defendió el bombero.
Añadió: "Violamos algunas reglas de tránsito como cada vez que acudimos a un servicio urgente, pero siempre con precaución."
Uno de los radares situados en una avenida se encendió cuando el camión de bomberos pasó por el lugar. Según la sanción, en ese momento circulaba a 122 kilómetros por hora, cuando el máximo permitido es de 100.
Desde el punto de vista del sargento, la dependencia debería obviar estas multas cuando se trate de un vehículo de servicio, teniendo en cuenta que circulaba con las sirenas encendidas.
La dirección de tránsito de una comunidad en Valencia, España, multó con 100 euros al conductor de un camión de bomberos por conducir a excesiva velocidad cuando se dirigía a apagar un incendio.
Los trabajadores del departamento de bomberos acudían por el llamado de un accidente vial, en el que la cabina de un camión de basura volcado ardía en llamas, según reportó el sitio Las Provincias.es.
"Cuando vamos a un servicio queremos llegar lo antes posible. Eso no quiere decir que vayamos de cualquier manera", se defendió el bombero.
Añadió: "Violamos algunas reglas de tránsito como cada vez que acudimos a un servicio urgente, pero siempre con precaución."
Uno de los radares situados en una avenida se encendió cuando el camión de bomberos pasó por el lugar. Según la sanción, en ese momento circulaba a 122 kilómetros por hora, cuando el máximo permitido es de 100.
Desde el punto de vista del sargento, la dependencia debería obviar estas multas cuando se trate de un vehículo de servicio, teniendo en cuenta que circulaba con las sirenas encendidas.
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